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sábado, 10 de noviembre de 2012

SALIVA VA EN LOS 40 LUNARES (USO ABUSIVO)

¿Cuál es tu concepto de deleite?

No era momento de teorizar, ya no se podía reflexionar sobre las tendencias, las posibilidades o todo aquello del pasado...  estaba desnuda, sin más que su olor y su pelo liso, que cubría sutilmente la redondez de sus senos, estaba brillante.

Besos... diálogos... su frente, su cara pintada de rubor, sus manos pequeñas, sus caderas, su abdomen... sus piernas... sus tobillos,  su vértice... todo fue explorado, conquistado, colonizado...

Ternura disfrazada de canibalismo que invadió el ambiente, órdenes y obediencias que sirvieron de marco protocolario,  música de fondo que marcaba el ritmo de movimientos, una luz carmesí que daba el toque necesario de indecencia, ron blanco con gotas de limón, cigarrillos...

Un extraordinario nivel de cooperación, el incipiente roce de los dedos en las caderas, la temperatura elevada, la justicia de los cuerpos, la venganza de las ganas, la agonía de poseer... hundidos, enredados, como densa selva... desarmados, cargados... con todas las prevenciones, sin anhelos trascendentales, con la verdad irrefutable de la piel.

Movimientos... espíritus temerosos del poder propio, ausentes de mente, con la misión fantasma de convertirse en los mismos sentidos... ángulos, reflejos de cuerpos danzando... como caminando sin dejar rastro con la certeza de la huella en el interior más profundo.

Pausa y un comentario sobre el verbo escalofriar... la discusión sobre el uso correcto de escalofrío...

Agitada la respiración y satisfecha la impaciencia, con el sabor en las gargantas del sudor compartido, con el manejo adecuado para besar 40 lunares, con la avenencia de la captura por un segundo de la esencia resbaladiza... una explosión que se advertía en gestos con visos de delicia.

Con paso de tortuga y el afán del fin del mundo... los pasados que se juntan, las experiencias que se acometen, se estrellan, se envisten... la mirada a los ojos como buscando la puntual persuasión... la construcción de símbolos... todo y nada.

Amantes que dejan de existir cuando se nombran, lo odioso de lo manifiesto, lo perentorio de lo oculto, el peligro de la negación... historias que se acomodan en lógica fractal.

La noche se hizo amanecer... cada segundo dejó su propia narración, un estudiante de espeleología, un aprendiz de dibujo sobre lienzo, una alquimista de alimentos, una coadicta, roles de mil generaciones, distancias sobornables, la complacencia de lo público y la demencia de lo privado... afinación de velocidades, aceptación de la sombra de una realidad.

Coincidencias... la pregunta sobre el destino... con el paisaje de los Alpes, con el tránsito desde la verbena, con la precisión de calibrar el agua caliente... quizá aves, quizá peces, tal vez diseños que pretenden juntar los nombres... como si se pudiera observar todo desde la terraza de un edificio... con la imagen de la luz penetrando las nubes grises... el miedo de un beso en la mejilla y la intuición de una próxima ocasión.

Desayuno.... desayunar... desayunados.

3 comentarios:

Anónimo dijo...

esto ya es un contenido semi pornográfico, jejejejejejejje

Anónimo dijo...

En el viaje que considero es la vida , he pasado largas noches con un sabor a soledad innata que nadie a podido quitar.
Es apresurado comentar.." pienso "... pero mis palabras no tendrán otro sentido que trasmitir lo grato que ha sido para mi sentir por un instante el valor , el sentimiento , el respeto y la sinceridad de cada palabra .

Anónimo dijo...

mi gran escritor, bello autor de tantas palabras que en tus manos se tornar poemas, tanto sentimiento plasmado, sentimientos que logran conmover aún a quienes no pertenecen a este mundo.
El amor, el placer, el dolor y los recuerdos son los caminos que tomas para poder escribir.
Una vez más me alegran tus letras, me inspiro al leerte y mi admiración por ti regresa, me alegra que estés escribiendo de nuevo sobre esas musas que te inspiran, que te recorren y a quienes haces feliz en esas, esas que tienen su propio sonido, que los observa, pero que a la vez calla, para luego quedarse ahí estática, esperando ver a otros amantes.
Sé feliz y hazla feliz...