AQUI PUEDES SEGUIR ESTE BLOG

lunes, 22 de julio de 2013

HOLA, SOY PETUNIA... HOLA, SOY GERANIO...

¿No te da miedo que me de miedo?

Esa madrugada, había empezado a escribir:

"Ella, una flor lanzada pronunciaba su nombre, y él un florido ser escuchaba con fascinación.

La primera pregunta que ella le hizo fue: ¿hacemos un jardín?, él, que estaba lleno de veneno, casi a punto de nunca más volver a florecer, sintió que sus colores fueron vistos de nuevo. 

Así, aquella florecita temeraria, se mecía al ritmo de la brisa primaveral, y él, ya había soportado varios inviernos.

Él pensaba que sólo necesitaba una compañera simple, sin tantos adornos, alguien que sólo disfrutara el color de las tardes y recibiera el sol sin más pretensiones que calentarse un poco... él había sido estafado, su anterior jardinera, lo había hecho revivir sus mejores momentos, pero, todo había quedado en una simple admiración tan pasajera como trivial, por tal razón, era un vegetal de sombra, austero y recio, que prefería la humedad de la noche y que remolcaba su pesar con la dignidad solitaria de aquel que no pudo ser amado y afilaba las espinas de su tallo, no por miedo, sino para evitar el dolor ese de creer en quien no lo merece.

Ella, la flor temeraria, había consumido algunos fertilizantes inadecuados, era una historia divertida y cruel, dejó caer en su raíz 7 pepas, que casi la dejan ciega, cuando despertó, todos los floricultores, supieron que iba a ser miedosa... aprendió a ocultar lo que sentía, fue adiestrada por el destino, para callarse eso de las innecesarias emociones.

Pero en aquel jardín, la naturaleza tenía sus propias tretas, fraguaba celestinos encuentros, que incitaban a gritar, a besarse, casi como observando la brisa que iba danzando como eligiendo a quien pudiera sentir."

Supo que el texto carecía de ritmo, tono y que era inconsistente, se desmoronó... sus letras felices, eran parte de una moda nostálgica, parecía que la torre de marfil, que era su imagen inquebrantable, se derretía, con sus recuerdos maléficos

Quería hacer tratados filosóficos, contra la estafa, contra la diferencia entre escalofrío y calosfrío, quería... y de repente ya no quería... 

"La Petunia duerme entre sus ocupaciones, ha hablado de sexo, de viajes, de crisis; el Geranio, tiene dolor de espalda y sus recientes jornadas de soledad, lo han puesto tosco... quizá mañana alguien remueva algo de tierra y riegue sus pétalos"

Y aquel escritor, prefirió dormir, quizá, quizá otro día llegue la inspiración.

2 comentarios:

Yo dijo...

Después de un tiempo... "uno aprende a plantar su propio jardín y decorar su propia alma, en lugar de esperar que alguien le traiga flores".

Emilia S dijo...

Hola!! tu blog está genial, me encantaria afiliarlo en mis sitios webs, por mi parte te pediría un enlace hacia mis web de peliculas y asi beneficiarnos ambos con mas visitas.

si estas de acuerdo me responde con un mensaje a emitacat@gmail.com

besoss!!
Emilia